Hola a todos los seguidores de este #blog, ya ha pasado un mes desde la última vez que escribí y han pasado muchas cosas. Bueno, realmente desde que inició el segundo semestre de 2017, han ocurrido diferentes situaciones en mi vida que me han hecho pensar en el valor que se le debe dar a cada momento que estamos en esta tierra. La muerte, ha sido una constante desde el 2012 hasta la fecha, a través del camino. Se han ido de viaje, como le digo yo, muchas personas que han sido de una u otra manera importantes para mi aprendizaje, que he recorrido durante 35 años. Personas que han dejado en mi interior grandes enseñanzas, amor, cariño, afecto, honestidad y sinceridad. Personas de las cuales aprendí el valor de poder cumplir con lo que uno se propone y con lo que uno sueña. Casi siempre, nos ponemos barreras, muros, piedras en el camino, gracias al miedo. A esa vibración negativa que no nos deja construir, ni crear nuestra realidad.
El miedo a la muerte es una de esas frecuencias bajas que nos han implantado en el alma. Gracias a esa necesidad narcisista y humanista de durar un montón de años en un cuerpo físico, el cual es prestado, porque no nos pertenece. Nuestra alma en cambio, si hace parte de nosotros y es la que evoluciona. La muerte es un viaje, es la liberación de la existencia en este planeta como en otros. Cada uno de nosotros, tiene un tiempo, un lugar y un espacio. Yo siempre traté de no tenerle miedo a eso, y gracias a tantas experiencias he comprendido que la palabra muerte no debería existir, se debería llamar viaje. Porque es así, cada uno de nosotros está de visita, sea prolongada o corta y por ende, nos vamos… porque nuestros cuerpos no son eternos.
Quiero decirles que he aprendido a decir adiós, he aprendido a amar en libertad y he aprendido a soltar el miedo. Soy feliz de ser la persona en la que me he convertido, en la que va evolucionando a medida que va viviendo experiencias, se va construyendo y va creciendo todos los días de su vida.
De nuevo les agradezco por leerme y por estar atentos a mis posts. Quiero contarles que a pesar de las dificultades vividas este semestre, he tenido regalos increíbles del universo. Ser docente y estudiante, me han brindado un conocimiento inimaginable. Pasar mi primer semestre de Maestría y terminar otro semestre dictando clases de Moda, me hace sentir satisfecha por cada uno de mis logros. Voy cumpliendo sueños, porque como dice Mia Astral (@mia_astral), los sueños se trabajan.
En el próximo post, les compartiré las fotos que mi amiga Maria Conchita, me tomó en el SOFA 2017, de mi stand comercial y de otros proyectos en los que estoy trabajando.
Gracias por leer!